Presidente de Cuba en China, última parada de su gira internacional
El presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, arribó hoy a Beijing para comenzar una visita de Estado a China, donde cerrará un periplo internacional que antes lo llevó a Argelia, Rusia y Türkiye.
El dignatario estará aquí hasta el 26 de noviembre próximo, llegó por invitación de su homólogo anfitrión, Xi Jinping, y desarrollará una corta pero intensa agenda de trabajo.
Lo acompañan los viceprimeros ministros Ricardo Cabrisas y Alejandro Gil; el canciller Bruno Rodríguez; los ministros Rodrigo Malmierca (Comercio Exterior e Inversión Extranjera), y Vicente de la O (Energía y Minas), más los vicecancilleres Anayansi Rodríguez y Emilio Lozana.
A la delegación su sumará el embajador de cubano aquí, Carlos Miguel Pereira.
Si bien todavía no hay detalles de la agenda, se espera que en las conversaciones oficiales Díaz-Canel y Xi repasen el estado de los vínculos bilaterales y proyecten nuevas acciones para fortalecerlos más en el futuro.
No obstante, el Ministerio chino de Relaciones Exteriores dijo esta semana que la estancia del presidente de Cuba inyectará un nuevo ímpetu al desarrollo de los nexos, al recalcar su relación de “buenos amigos, buenos camaradas y buenos hermanos”.
También estimó que dará impulso renovado a la amistad tradicional y la cooperación fraternal en las dos naciones, las cuales calificó como un modelo de solidaridad, colaboración y asistencia mutua.
China es la cuarta y última parada de la presente gira de Díaz-Canel, quien anteriormente estuvo aquí en 2013 y 2015 como vicepresidente de Cuba, y luego en noviembre de 2018 realizó su primera visita en condición de Presidente.
El actual periplo busca consolidar las relaciones y explorar en cada parada las oportunidades para ampliar la cooperación bilateral en diferentes sectores y con beneficio mutuo.
Durante el viaje anterior del dignatario en 2018 las dos naciones socialistas afianzaron sus nexos en materia económica con la firma de varios memorandos de entendimiento, entre ellos uno relativo a ampliar la cooperación en el contexto de la iniciativa de la Franja y la Ruta.
Cuba y China suscribieron convenios para incrementar la capacidad productiva en proyectos priorizados de colaboración y la concesión de un crédito chino que respaldaría la adquisición de equipos de construcción para los sectores de energías renovables y el turismo.
Otro texto se refirió al suministro de maquinarias para incrementar la producción de cultivos varios en la oriental provincia de Guantánamo y el último fue sobre la entrega de la recepción de proyectos de fábricas de conservas de frutas y vegetales.