Buscando solución para las colas por combustible

Desde hace varias semanas Cuba enfrenta dificultades con el abastecimiento de combustibles imprescindibles para el buen desenvolvimiento de la sociedad, y ha sido así tanto para el sector estatal como el privado. Todos hemos sido perjudicados de una manera directa o no, y esta situación de escasez deteriora seriamente el desarrollo y la calidad de vida del país, pues de estos recursos depende en gran medida no solo el movimiento de vehículos, sino el mantenimiento de servicios fundamentales como la electricidad.

Es por eso, recordemos, que para limitar las afectaciones y no interrumpir la generación eléctrica, así como para evitar aglomeraciones y otros males, se decidió organizar el acceso al poco combustible que se puede ofrecer. En primer lugar, se dispuso una cantidad precisa de servicentros y de litros por vehículo, de modo que cada chofer tenía uno o varios asignados para abastecerse, según la categoría de su carro y el objeto social de su licencia, o sea, se agruparon los de gasolina y diesel, los particulares por un lado, y por otro los estatales, y así sucesivamente según cada condición.

Luego el problema fueron las inmensas colas de días enteros y a veces más, además del oportunismo de personas que comenzaron a lucrar con la dificultad, seguido del desorden y el descontento social. Así que, para contrarrestarlo, surgieron ideas que van desde listas hechas a mano, grupos de WhatsApp y Telegram, así como el empleo de aplicaciones como Ticket, el sistema de reservaciones en línea. Sin embargo, todas esas iniciativas son perfectibles.

Mi Turno es una plataforma alternativa, aún no oficial, diseñada especialmente para ayudar a todos, tanto a organizadores como personas interesadas. “Es una propuesta que posibilita ordenar las colas, saber cuándo le toca a cada quién. Es una herramienta enfocada en facilitarle información al pueblo, de manera transparente, sobre la cantidad de combustible en cada estación” —comenta Leonardo Texidó Quintana, joven ingeniero informático.

“El mecanismo que propongo involucra a los mismos responsables dispuestos por el gobierno para ayudar en la tarea, continuarían siendo ellos los encargados de especificar todos los datos”. Se trata de un método sencillo, concebido para, además, facilitarles a las personas y hacerle más orgánica la gestión de abastecerse, sin aglomeraciones, desde la tranquilidad de su hogar, a través del teléfono móvil, computadora o tableta.

De acuerdo con su creador, “solo basta con acceder al sitio web de Mi Turno desde el navegador donde, la primera vez, deberá ofrecer información básica para registrarse como número de carnet de identidad, nombre, teléfono, correo y contraseña. Una vez registrado pasa a una vista muy simple donde la única opción es Adicionar un Auto, y allí debe especificar la matrícula y el tipo de combustible que utiliza”.

Posteriormente el usuario podrá solicitar turno aportando la placa del vehículo, escogerá el servicentro donde abastecerse, y por último el sistema le asignará un número único y quedará en lista de espera hasta que le llegue el momento de acudir al sitio para serviciar.

Con unos pasos muy básicos, los choferes se pueden evitar largas filas para anotarse en listas y, además, podrán, desde Mi Turno, tener información clara sobre la cantidad de combustible que llega a cada servicentro, el que va quedando a medida que se abastece, así como su lugar en la cola. De igual forma establece cada qué tiempo cada persona puede marcar según el lugar y la demanda, de modo que favorece un mejor reparto del recurso. Es una herramienta que no puede ser alterada, evita aglomeraciones y especulación.

La plataforma se encuentra aún en fase de prueba y posee un grupo en Telegram donde todos los días se hacen lluvias de ideas para perfeccionarlo mientras las entidades correspondientes evalúan su implementación. El acceso es completamente gratuito, y su creador, Texidó, refiere que fue hecha sin fines de lucro, y sus motivaciones fueron únicamente colaborar para resolver la necesidad de una iniciativa que de verdad funcione, que sea fácil y muestre confianza, “sobre todo porque en medio de una crisis se debe buscar alternativas que sean lo más transparentes posibles”.